jueves, 22 de enero de 2009

Puta mierda de vida

Si la vida fuera justa, yo no estaría aquí. Si la vida fuera justa, de hecho, debería estar en cualquier otro lugar lejos, muy lejos de aquí. Estoy hasta la polla de Tortuosa. Un agujero negro. Un puto agujero negro, eso es lo que es. Si la vida fuera justa estaría lejos de esta puta cafetería que me tiene harto. Bueno, como dicen por aquí, ¿qué es lo que no me tiene harto a mi?
Pero ellos no tienen la vida que yo tengo, ni la han tenido, ni la tendrán.
Ellos han conocido a su madre, por ejemplo. A la mía le dio por morirse el día que nací. Y claro, Jalu siempre fue un niño un poco "raro". Jalu, el que no tiene madre. Qué dominio de la palabra, que capacidad de síntesis tiene la gente de Tortuosa. Grandes linguistas.
Claro, ellos han conocido a su padre, y se han llevado más o menos bien. Lo mío ha sido más como un combate de boxeo. Ya se sabe que cuando eres adolescente y tienes que recoger a tu padre del puto bar de la esquina borracho como una cuba, te haces un poco raro. Introspectivo, vamos. O como dicen por aquí, "un poco metío en su mundo".
- Otro whisky, por favor.- mientras enciende un cigarro, Jalu echa un vistazo a su alrededor. Las mismas caras, los mismos gestos. Aunque cree advertir algo diferente.- Gracias.
- Jalu, no deberías...
- Gracias. Si quiero otro, te llamo.
Sí. Gran gente esta de Tortuosa. Hasta ven raro que uno esté tomando whiskazos en lugar de cafelitos. Me suda la polla. Ellos no tienen la vida que yo tengo, ni la han tenido, ni la tendrán.
Ellos no tienen que enterrar a su padre esta misma tarde. Puta mierda de vida.